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Valoración de riesgo para un uso adecuado de los desechos

El tratamiento incorrecto de residuos ocasiona grandes daños a la salud humana y al medio ambiente.

Es necesario realizar una valoración de los riesgos que implican la falta de estrategias que permitan reciclar y reutilizar los desperdicios para crear materia prima que permita minimizar el impacto medioambiental y reducir los costes de las empresas.

Valoración de riesgo: significado e implementación

La valoración de riesgos implica un método sistemático para predecir los riesgos potenciales para la salud humana o el medio ambiente que causa el tratamiento inadecuado de los residuos.

El fin de una evaluación de riesgos es investigar si se está utilizando una gestión de residuos adecuada, sin causar efectos perjudiciales para la salud o el medio ambiente.

Esta valoración es realizada por personal calificado que evalúa cuantitativa y cualitativamente el daño e impacto que ocasiona al medio ambiente el incorrecto tratamiento de los desechos y la falta de medidas de reutilización de estos recursos.

Consecuencias en una incorrecta gestión de residuos

Los efectos de una gestión inadecuada de residuos no solo producen daños al medio ambiente, sino que también afectan la economía de un país. El estado se ve obligado a usar mucho dinero de su presupuesto para contrarrestar los problemas generados por una gestión errónea de residuos.

Por otra parte, dentro del medioambiente, la fauna que la forma también se encuentra en riesgo debido a factores y accidentes que puedan producirse como derrames petroleros o el vertido de productos químicos que causan la contaminación del suelo y el agua. De igual forma, la quema de los desechos y materiales plásticos desechados de forma incontrolada genera contaminación ambiental y del aire.

Agentes que producen contaminación

Aunque todos están familiarizados con métodos más comunes de gestión de residuos como el reciclaje, vertederos, incineración, procesamiento biológico o conservación de energía; estos se encuentran en un mundo lleno de desechos.

La energía renovable y la reutilización de residuos para desarrollar nueva materia prima (reciclaje), reducen los riesgos medioambientales, pero los efectos ocasionados por la gestión inadecuada de residuos continúan siendo mayores.

Contaminación del suelo y la gestión de residuos

La mayoría de las veces los desechos de plástico, vidrio, metal y papel terminan en una instalación de reciclaje; y posteriormente regresa a nosotros en forma de producto renovable y reciclado.

Sin embargo, cuando se les da un tratamiento inadecuado a estos residuos y terminan en un vertedero, se produce una contaminación producto del derrame y entierro de materiales peligrosos en el suelo.

Desechos causantes de la contaminación del aire

Al no tomar medidas de reciclaje con desechos como el papel y el plástico que terminan en los vertederos, se ocasiona un deterioro en la capa de ozono, puesto que en estos centros suelen quemar estos residuos.

Este proceso de incineración ocasiona la generación gases, los productos químicos liberados que se acumulan y contribuyen al detrimento de la capa de ozono, también dañan a la población humana circundante.

Residuos que originan la contaminación del agua

El agua es un solvente para algunos residuos químicos que son tratados incorrectamente al momento de desecharlos. Esto trae como resultado una inminente contaminación en el agua que puede terminar en estanques, lagos e incluso embalses, lo que conlleva a que tanto animales como personas consuman agua en mal estado, lo que ocasionaría daños a su salud.

Deterioro de la vida marina

Una valoración de riesgo al medio ambiente debe tomar en cuenta el impacto que ocasiona un inadecuado desecho de los residuos a la vida marina.

A pesar de las estrictas medidas que son tomadas para detenerlo, algunos irresponsables o inconscientes siguen vertiendo basura, desechos tóxicos, aguas residuales crudas o sin tratar al mar. Cualquier animal o vida marina que entre en contacto con esas sustancias se ve afectado de la peor manera posible.

Cambios climáticos ocasionados por desechos inadecuados

Los gases de efecto invernadero que son generados a partir de la descomposición de los desechos, se elevan a la atmósfera atrapando el calor, provocando reacciones climáticas en forma de tormentas y tifones.

La evaluación de riesgo debe detectar las causas de este impacto climático que ocasiona desequilibrio en las temperaturas y en los niveles de precipitación en el aire.

Fases para la valoración de riesgos ambientales

Toda Valoración de Riesgos Ambientales debe ser ejecutada bajo la metodología establecida por el Real Decreto 9/2005, la cual indica la relación de actividades potencialmente contaminantes del suelo, así como también especifica los criterios para la declaración de suelos contaminados.

Dicha declaración establece parámetros a seguir para una evaluación oportuna sobre el tratamiento que se le está dando a los residuos.

Primera fase: Identificación de peligros

En esta fase se debe precisar los focos de contaminación dentro de los residuos, contaminantes presentes y su distribución, así como mecanismos de transporte, vías de exposición y receptores potenciales de la contaminación detectada.

Segunda fase: Evaluación toxicológica

La finalidad de esta segunda fase es determinar cuantitativamente el daño de toxicidad de los contaminantes para identificar el riesgo de exposición y luego la relación entre dosis contaminante y efecto adverso.

Tercera Fase: Evaluación de la exposición directa e indirecta

La amenaza que representa la exposición a los diferentes desechos contaminantes es evaluada en esta fase. La exposición directa a los niveles de contaminación es la que se da al tener contacto con el suelo o en el vertido en agua.

Por su parte, la exposición indirecta se da por la inhalación de vapores procedentes del suelo o de aguas subterráneas. En este caso el riesgo viene asociado al tiempo de exposición.

Cuarta fase:  Caracterización del riesgo

Esta fase final involucra la evaluación del riesgo que tienen los contaminantes para la salud según la dosis y el tiempo de exposición. Cuando la valoración de riesgos ambientales comprueba valores elevados, se deberá eliminar el riesgo totalmente o reducirse a niveles que sean aceptables según la legislación vigente.

La valoración de riesgo ambiental debe recomendar acciones que ayuden a minimizar el impacto ambiental que ocasionan el tratamiento de los residuos en vertederos u otros sitios no aptos para su desecho. El reciclaje y la reutilización de los residuos forman parte de las estrategias a seguir para un aprovechamiento de los mismos.

Realizar una adecuada valoración de riesgo ambiental que supone un desecho inadecuado de los residuos es determinante para el progreso de cualquier empresa o país.

De ello depende no solo un desarrollo económico sustentable, sino el cuidado y preservación del medio ambiente, así como la salud de los seres vivos involucrados en el entorno donde se realiza el tratamiento de desechos altamente contaminantes.

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